El amor no conoce de religiones, razas o estatus social ya que cuando uno se enamora, lucha por esa persona. Algunas parejas que son de diferentes países sufren por las barreras culturales, presión social y entre otras cosas. Sin embargo, la historia de una mexicana y su novio coreano está siendo viral en las redes sociales.
Su nombre es Brenda Tello Mojica y esta es su hermosa historia:
“La mayoría de los fans de la onda Hayllu hemos pasado por allí. Enfrente de la televisión, compu o el celular viendo ese dorama/drama coreano fantaseando con el quizá algún día obtener un novio coreano (pero como el protagonista, no como el secundario que siempre dejamos en la friendzone), y yo por obras del destino obtuve el mío.
Nuestra historia de amor no es tan diferente o drámatica como la que esperarían, fue que realmente él me mandó un mensaje por medio de Instagramun un buen día que se topó con mi perfil
Pero!!Hay una anécdota que si recuerdo, y que quizá es un elemento de dorama. Mi actual pareja fue profesor en la escuela en la Ciudad de México, la Escuela de Cultura Asiática Ninshi, donde enseñaba el idioma coreano. Y justo cuando yo fui alumna durante una época, el estaba trabajando allí. Recuerdo MUY vívidamente dos días:
Uno. Donde literalmente, un día nada más se metió a distraer a la maestra que me estaba dando clase y decidió sentarse en el asiento detrás de mi. Hasta donde yo recuerdo, en esa época el era uno de los maestros que más llamaban la atención, y claro que mi caso no fue diferente. Me encantaba verlo, así que recuerdo haberme puesto nerviosa el diá que se sentó detrás de mi.
Dos. Saliendo de clase, recuerdo bien un día que estaba recargada en un árbol que está al otro lado de la calle donde está la escuela, estaba esperando a un amigo para que pasara por mi. Mientras esperaba, recuerdo como Samy salió y caminó sobre la calle, mientras que detrás de él, un grupo de quizás 7 o 9 chicas de mi misma clase lo siguieron (No, no estoy exagerando), y cuando regresó, (con un paquete de cigarros en la mano) las mismas chicas lo seguían de nuevo.
A lo cual yo recuerdo VÍVIDAMENTE que me dije a mi misma:´Nop. Ete tipo jamás va a voltear a ver a alguien más. Creo que a él le tiene que llamar verdaderamente la atención una chica, y ESA será la que tenga esa oportunidad de estar con él´. Y resignada esperé a mi amigo y regresé a casa.
Adelantamos unos años al futuro y nos encontramos al hoy en día. Quizás si estábamos destinado a estar juntos.
Ahora. ¿Una relación con un coreano es como en los doramas?. Si y no. Jajajaja, no, no se levantan y tienen las cejas perfectamente delineados y los poros difuminados. No, no son unos serios y reservados hasta que se enamoran y se vuelven súper románticos. No, nos dramatizan sus problemas en lo que golpean sensualmente la pared en la regadera (aunque…si es lindo verlos bajo la regadera).
No puedo hablas por experiencias ajenas a la mía pues no tengo un novio protagonista de dorama, pero si tengo un novio coreano que se entregó incondicionalmente a mi y yo a él, y a final de cuentas , sea de aquí, sea de allá, eso es lo único que puede importar en el momento de tener una relación.
Ahora, eso si. Al menos tener un novio coreano tienen acceso a la comida, la gente, el idioma y mucho más…que eso si no falla. Pues sin importar cuánto tiempo haya pasado entre nosotros, siempre me encantará escucharlo en su propio idioma, y experimentar lo que más podamos juntos su cultura”
Fuente: Mi Asia Pop