En Japón, resulta difícil establecer una relación sentimental ya que no tienen tiempo debido a que se enfocan más en el trabajo o algunos no quieren lidiar con personas y por eso hemos conocido casos insólitos de hombres que se casan con animes o muñecas.
En ese país, suelen ser machistas en todos los aspectos y por ello es complicado para las mujeres lograr éxitos como ascender en una empresa incluso no es sencillo pedir un aumento, todas esas situaciones las estresan más, pero para aquellas que se sienten frustradas y no tienen con quien desahogarse, una compañía decidió acabar con ese problema ofreciéndole a las señoritas alquilar un novio para que sea su pañuelo de lagrimas. No puede ser cualquiera, debe ser un “ikemen” (guapo en japones).
El servicio consiste en que ellos deben hacerlas llorar para que se desahoguen y se animen a contar sobre sus desilusiones o fracasos, luego el chico tendrá que secarle sus lagrimas tocándole la mejilla con mucho amor